GĀO Restó: la cocina china que soñó Karina Gao
La reconocida influencer gastronómica abrió su primer restaurante en Buenos Aires, donde fusiona tradición, familia y cultura china con una mirada moderna y accesible.
Luego de años de construir un vínculo sólido con el público a través de las redes y la comunicación gastronómica, Karina Gao da un gran paso y abre las puertas de GĀO Restó, su primer restaurante. Ubicado en el Bajo Belgrano, este nuevo espacio propone una experiencia de cocina china genuina, contada desde las raíces familiares y pensada para conectar con el paladar argentino.
El proyecto nace como un sueño postergado durante más de 15 años, cuando Gao, economista de formación y especialista en emprendedurismo, imaginaba una cadena de restaurantes chinos con identidad propia. Hoy ese deseo se materializa en un restaurante cálido y contemporáneo, donde cada ítem está pensado para contar una historia: desde la ambientación —que fusiona colores y símbolos de China, Francia y Argentina— hasta el menú, basado en recetas típicas y sabores reales, pero adaptados con sensibilidad al gusto local.
Desde el primer momento, Karina imaginó un restaurante que hiciera sentir a cada comensal como en casa. GĀO Restó está pensado como un espacio cálido, donde se celebra la vida en todas sus formas: encuentros familiares, cumpleaños, cenas románticas o salidas con amigas. La ambientación —a cargo de los estudios Reina de Plata y Ripani— logra una fusión moderna que se aleja de los estereotipos del restaurante chino tradicional, reflejando una identidad profundamente personal. La paleta de colores combina el rojo de la cultura china, el azul Francia —en homenaje a la familia de su marido— y el celeste argentino, representando las tres culturas que conviven a diario en la vida de Karina. El proceso de diseño, que llevó ocho meses de trabajo para definir el naming y la estética visual, dio como resultado un lugar auténtico y lleno de detalles que transmiten el espíritu de su creadora.
La propuesta culinaria, desarrollada por la propia Karina, incluye opciones sin TACC, platos aptos para veganos y un postre helado chino que ya se volvió icónico por su sabor y estética.
La carta de GĀO Restó recorre distintas regiones de China, con recetas tradicionales y otros más accesibles y pensadas para todos los públicos. Entre las entradas, se destacan el Chūnjuǎn 中式春卷
arrolladito primavera al vapor que sale tal cual como lo suelen comer los chino, con masa al vapor y arrollado en el momento; también las Zhēnzhū wánzi, albóndigas perladas de cerdo y langostinos servidas al vapor; los clásicos Jiān jiǎo, raviolitos de cerdo dorados a la plancha, y la Mìzhī chāshāo, bondiola laqueada con miel, una especialidad que combina dulzor y umami con técnica precisa. También hay una sección veggie con alternativas como el Tángcù huācài Coliflor agridulce, la Yúxiāng qiézibǎo —cazuela de berenjenas— o las Gānchǎo dòujiǎo, chauchas salteadas con sabores intensos y sabrosos.
Para quienes buscan opciones con hidratos, los fideos ocupan un lugar central: Bànmiàn, con brotes, salsa de maní y aceite de cebolla; Niúròu chǎomiàn, salteados con ternera; Zhàjiàng miàn, con estofado de cerdo, o el reconfortante Hóngshāo niúròumiàn, una variante de ramen con costillar de asado del centro estofada al estilo chino. Las proteínas, por su parte, se presentan en preparaciones como las Baby Ribs, plato heredado de su madre, el Sān bēijī (pollo a los tres aromas), el Gōngbǎo jīdīng (pollo al Gongbao) o el Háoyóu niúròu (ternera con salsa de ostras y verduras), junto con alternativas veganas como el Sù mápódòufu, una versión vegetal del clásico mapo tofu.
Los postres cierran con propuestas originales y visualmente impactantes. El Shíjǐn pàobīng, un helado chino para compartir, ya se convirtió en uno de los más pedidos y se suman opciones como el tiramisú de matcha, la Zhīma nǎiyóu bùlěi (crème brûlée de sésamo) y los Qiǎokèlì fúdài, bolsitas de la fortuna rellenas de chocolate. Las bebidas incluyen limonadas, pomeladas, tés fríos y calientes, gaseosas, agua y café de especialidad.
En GĀO Restó la gastronomía es sólo una parte de la experiencia. El local cuenta con juegos para niños inspirados en la cultura china, un muro de aprendizaje de caracteres y un servicio atento, amable y atento, pensado para recibir desde cenas románticas hasta celebraciones con amigas o reuniones en familia.
GĀO Restó es una invitación a redescubrir la cocina china desde el afecto, la memoria y la autenticidad. Una propuesta que acerca culturas y demuestra que, aunque nos separen miles de kilómetros, el lenguaje del sabor es universal.
GĀO Restó
Dirección: Cazadores 1911, Belgrano.
Horarios: Abierto todos los días para almorzar y cenar.
De lunes a jueves de 12 a 15 y de 19.30 a 00 y de viernes a domingos de 20 a 00 hs.
Instagram: @gaoresto